Reformas: modernizando un piso chapado a la antigua

Reforma de vivienda en Batalla de Almansa Zaragoza, A54Insitu A54Insitu
Loading admin actions …

La arquitectura puede llegar a ser un espectáculo, incluso aplicada al campo doméstico. Hoy descubrimos un proyecto pequeño, una reforma que bien podría haberse llevado a cabo en cualquiera de nuestras viviendas. Abrimos la puerta de un apartamento que a muchos de nosotros puede resultarnos más que familiar. Y es que este piso situado en la primera planta de un edificio de Zaragoza refleja la realidad de muchos de nosotros y de nuestras casas. Totalmente habitable, aunque sin grandes pretensiones, su distribución y aspecto eran mejorables en muchos sentidos. Materiales de otra época, falta de estilo en su diseño y decoración y una compartimentación deficiente, que ponía barreras a la entrada de luz natural, eran sus principales problemas. 

Sin embargo, y en contra de lo que muchos creerían, una reforma ha conseguido convertirlo en un apartamento de diseño digno de admirar. A54Insitu ha sido la mano, cuya varita mágica ha conseguido mejorar la vida de los dueños de esta casa, brindándoles la oportunidad de vivir en un hogar más cómodo y cálido.

Y para que la magia de esta reforma sea más evidente, comparamos las fotos del antes y el después de este apartamento. 

El acceso

Corremos la llave, empujamos la puerta y ante nosotros se abre esta imagen: un apartamento más que normal, construido hace varios años en un contexto diferente. El pavimento de granito y el color oscuro de la madera nos transporta varias décadas atrás, donde el estilo tenía un sentido diferente. Como todas las viviendas antiguas, la casa empieza con un recibidor, donde un sinfín de puertas conducen a las distintas estancias, todas separadas. La bienvenida no es precisamente cálida, sin mencionar la pérdida de espacio que implican distribuciones de este tipo. 

Antes: la cocina

Antes de la reforma, la cocina era un espacio chapado a la antigua. Su geometría, alargada y estrecha, no permitía muchas otras posibilidades a la hora de distribuirla: a un lado los usos principales, como encimera, electrodomésticos, fogones, fregadero y almacenamiento, y a la otra una bancada a medio camino entre encimera y mesa alta. Sus materiales, acabados y colores, sin embargo, podían mejorar notablemente la atmósfera impregnada en este espacio escasamente iluminado.

Después: la cocina

Con la misma perspectiva, esta fotografía fue tomada tras la reforma. ¿Es posible que la cocina anterior se haya podido transformar en esta otra? Podemos observar como la forma del espacio es exactamente la misma, alargada y estrecha, así como la distribución. Sin embargo, el paisaje es totalmente diferente. 

En el mismo lado que antes se han colocado los usos principales, ahora con un aspecto más limpio y aseado dominado por el blanco. En la pared de enfrente se ha terminado de llevar a cabo esa idea que antes se encontraba a medias: un banco y unos taburetes dan forma a un comedor informal para el día a día. Con ánimo de hacer el espacio más funcional, se ha eliminado la antigua galería, permitiendo que la cocine se bañe con luz natural. Aunque los tonos claros sean predominantes, a nivel estético el suelo es indudablemente el protagonista, con un estampado moderno de color azul.

Antes: el cuarto de baño

De escasa superficie y no conectado con el exterior, el cuarto de baño se encontraba en la misma situación que la anterior cocina: su geometría no permitía mucho más juego a la hora de distribuirla. Pero quizá los sanitarios y muebles podrían jugar un papel diferente creando un paisaje más fluido y abierto. En este caso, la ducha cerrada tomaba demasiado protagonismo y apelmazaba visualmente el espacio. 

Después: el cuarto de baño

Ahora, con la misma distribución, ¿quién no piensa que se ha ganado espacio? Aquí, como en la cocina, los materiales y los muebles son las principales razones de este cambio radical. Incluso se ha ganado comodidad y funcionalidad. La ducha ya no está encajada en una esquina, sino que se extiende a lo ancho del fondo. Sin embargo, una mampara de vidrio transparente juega con nuestra percepción y disimula su presencia. El inodoro y el lavabo se encuentra también en la misma posición, pero han perdido tamaño encajando ahora mejor en el espacio. El antiguo alicatado con cenefa se ha sustituido por uno en blanco brillante que gana en luminosidad. Un toque de madera, y un espejo de diseño hacen un guiño a lo moderno. 

Antes: el dormitorio

El dormitorio principal resultaba pequeño y poco acogedor. Su iluminación era escasa, y su paleta de colores oscura no favorecía la poca entrada de luz por su única ventana al exterior. Terminaba de completar esta escena una lámpara de araña que, fuera completamente de contexto, captaba el foco de las miradas. 

Después: el dormitorio

Ahora el dormitorio luce de esta manera. Los muebles, más modernos, se adaptan mejor al espacio. Se ha seguido la filosofía de que en la sencillez está la elegancia, y por eso solo se han colocado las piezas de mobiliario necesarias. Las cortinas han sido sustituidas por unas de textura más fresca y color más blanco, favorenciendo así la entrada de luz. Las paredes se han pintado de blanco, así como se han lacado las puertas del armario empotrado que se encuentra en la misma posición que el anterior. Ahora, su aspecto se camufla mejor en el paisaje, pasando casi desaparecibido. El pavimento de madera clara aporta una nota de calidez al conjunto, convirtiendo a este nuevo dormitorio en una habitación cálida y moderna. 

Antes: el salón

Tras ver el resto de estancias, no podíamos esperar mucho más del salón. Otra vez más, el pavimento de granito tomaba un protagonismo innecesario con su estampado en tonos marrones. Los muebles, parece que elegidos al azar, no se conectaban los unos con los otros a nivel de estilo o materialidad. Además, sus colores no eran los más adecuados teniendo en cuenta la falta de luz que recibe este apartamento situado en primera planta.

Después: el salón

Ahora, el salón es una estancia luminosa y elegante. Aquí también se ha elegido el color blanco como protagonista, combinado con el tono de madera clara del pavimento y el color gris del sofá. El mobiliario se adapta mejor a la estancia, que ahora es más fluida y abierta. Y, además, este nuevo diseño ha permitido diferenciar más los usos en este espacio. 

Después: el comedor

Al fondo de la estancia se ha colocado el comedor, con una mesa redonda lacada en blanco y una alacena moderna, donde guardar la vajilla. La decoración es sencilla, pero actual, de manera que pone una nota de color sin recargar el paisaje, como ocurría antes.

Tras la reforma, el apartamento se ha convertido en un lugar totalmente diferente. Es acogedor, más luminoso y se adapta a las nuevas tendencias de decoración y diseño vanguardistas. 

¿Más proyectos similares?

Cómo hacer más acogedora una casa: una reforma en Madrid

تريد مساعدة في إتمام مشروع بيتك؟
تواصل معنا الآن

يبرز من مجلتنا