Dormitorios infantiles: cuando toca compartir cuarto

María Bausán María Bausán
Reforma de una vivienda en la c/ Consell de Cent, Anna & Eugeni Bach Anna & Eugeni Bach غرفة الاطفال
Loading admin actions …

Cuando somos pequeños, nuestro cuarto es un castillo: una fortaleza donde crecer y aprender a cuidarnos por nosotros mismos. Pero en esa fortaleza no siempre estamos solos, muchas veces tenemos que compartir nuestras cuatro paredes con un hermano o hermana

Lejos de ser una desgracia, compartir cuarto cuando somos pequeños es una de las mejores experiencias que un niño puede tener. A pesar de que nuestro espacio se vea reducido a la mitad, tengamos que compartir armario, con el lío de calcetines, camisetas y cinturones que eso supone, escuchar ronquidos y movimientos bruscos en medio de la noche, aguantar que den la luz en pleno sueño para levantarse al baño y otra gran multitud de inconvenientes, la experiencia merece la pena, sobre todo  si pensamos que compartir habitación es tener siempre alguien cerca que nos defienda, o al menos nos acompañe, si nos atacan los monstruos nocturnos. Quizá por eso, ese primer compañero será nuestro fiel escudero toda la vida. 

Pero compartir habitación no tiene por qué estar reñido con la falta de espacio, ni con habitaciones caóticas y abarrotadas de muebles. Aquí mostramos algunas habitaciones infantiles compartidas, donde ser niño será, si cabe, mucho más divertido. Además, aquí se pueden ver más diseños de habitaciones infantiles  de homify.

Dos camas

Un clásico de las habitaciones infantiles compartidas, son las dos camas, separadas entre sí por la mesilla. Aquí, esta ha sido sustituida por algo menos práctico, pero mucho más divertido: un cajón para los juguetes. Esta habitación cuenta con techos muy altos, lo que da una mayor sensación de amplitud. Además, el enorme ventanal da mucha luz al espacio, algo que se refuerza con el predominio del blanco en paredes y camas.  

Si el espacio nos lo permite, se puede preparar la habitación con dos camas iguales, con edredones iguales que unifican el espacio, y que evitan comparaciones odiosas y piques, tan frecuentes entre hermanos. Eso sí, de la decoración infantil de la cama (peluches incorporados) ya se ocupa cada uno.

Literas con imaginación

Una de las soluciones más prácticas cuando tenemos que diseñar un cuarto con dos camas, son las literas. Prácticas y funcionales, las literas ahorran espacio y son siempre una buena alternativa. Además, se pueden conseguir camas tan creativas como esta. En forma de casa y con un toque marinero, esta cama es ideal para dejar volar la imaginación de los más pequeños. 

En cualquier caso, las literas son siempre una buena opción para las habitaciones compartidas. La cama superior siempre está convenientemente rodeada por una barandilla, para evitar caídas peligrosas.

No obstante, ténganse en cuenta: los sonámbulos, mejor en la cama de abajo.

En forma de ele

En esta habitación se ha creado una variación de literas en forma de ele. Aprovechando la cama que ya se tenía, se ha comprado una cama alta y se ha colocado la anterior debajo en forma de ele. Ocupa un poco más de espacio que una litera normal, pero al mismo tiempo permite más interacción entre los pequeños. Además, deja un espacio bajo la cama superior que puede aprovecharse para guardar juguetes. 

Cada uno su espacio

Si tenemos la posibilidad de hacer obra en el dormitorio infantil, poner un muro de separación entre los espacios de cada niño puede ser una solución, especialmente cuando los pequeños empiezan a crecer y a reclamar un poquito más de intimidad. 

Para marcar las diferencias, además del muro, se pueden introducir cambios drásticos como tonalidades diferentes en las paredes o murales infantiles en cada parte, consiguiendo así tener dos habitaciones en una. 

تريد مساعدة في إتمام مشروع بيتك؟
تواصل معنا الآن

يبرز من مجلتنا