Una casa moderna y ¡llena de luz!

Lo primero que vemos de esta vivienda es esta increíble fachada con una línea moderna. Siguiendo un juego de volúmenes, de cubículos, da lugar a una casa amplia, dividida en dos pisos y llena de luz. Y es que si hay algo que nos gusta de Villa Wainer es la enorme cantidad de ventanales que la recorren. 

En cuanto a la zona exterior, vemos nada más salir de la vivienda una terraza con un salón de exterior en el que disfrutar de una agradable velada al lado de la piscina. Una piscina grande, rodeada de tablones de madera con un acabado desgastado. Una tonalidad que concuerda perfectamente con la de la fachada.

Ya en el interior de la vivienda vemos exactamente lo que nos imaginábamos: una cantidad de luz increíble. Además las paredes y techos se han pintado en color blanco para que refleje aún más si cabe. Para el suelo de este salón se apostado por la tarima de madera natural que aporta calidez, y en el mobiliario por un diseño moderno, con cierto aire minimalista. Según sus propios creadores, una zona de estar para vivir de dentro hacia fuera con carpinterías de aluminio que conectan interior y exterior. 

En esta fotografía vemos la preciosa cocina en completo blanco de un estilo moderno y minimalista, realmente funcional dado el enorme espacio de paso con el que cuenta. Nos encanta la propuesta de la isla de centro que se alarga por uno de sus laterales hasta convertirse en una pequeña mesa de cocina con espacio para 4 personas. Pero por si eso no fuese suficiente, la cocina tiene acceso directo a un bonito comedor de exterior con una pequeña barbacoa al lado. ¿Te gusta?

Las puertas correderas de esta casa son una excelente solución térmica, acústica y de aislamiento que además no perjudica la estética y el diseño de la vivienda. Es más, se caracterizan por facilitar el paso de la luz y la circulación. También ofrecen un abanico de posibilidades en correderas en ángulo y encastrables en la pared. Son una perfecta alternativa para integrar el jardín y la casa sin divisiones visibles. Además las correderas de ángulo con contraventanas integradas deslizantes son el elemento ideal para las viviendas unifamiliares de este tipo.

Por último, nos despediremos de Villa Wainer saliendo por esta puerta. Una zona donde nos encontramos directamente con la escalera de acceso al piso superior, hecha en madera y que parece sostenerse en el aire. Cuenta con una barandilla en cristal que se prolonga hasta el suelo. Además las modernas lámparas que quedan suspendidas sobre esta zona aportan verticalidad y sofisticación a este ambiente minimalista.