Ático en Barcelona ¡minimalista y urbanita!

Silvia Pino Silvia Pino
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Muchas veces ocurre que un piso completamente nuevo no se adapta a nuestras necesidades. Entonces, es mejor hacer un par de cambios y convertir esa vivienda impersonal en nuestro hogar antes de mudarnos. Este precisamente fue el caso de una pareja que encargó al estudio de arquitectura Dröm Living la reforma de un ático en Poblenou completamente nuevo y sin estrenar, pero que querían transformar en una vivienda con unos interiores modernos, minimalistas y espacios sin particiones. Y sobre todo, en una vivienda que encajara con su personalidad y su amor a la ciudad de Barcelona.

Si nos acompañáis en este libro de ideas vais a conocer un increíble ático con un carácter muy urbanita. ¿Estáis preparados?

Barcelona en cada rincón

Los propietarios de este ático tenían una cosa bien clara: Barcelona tenía que ser la protagonista indiscutible de sus interiores. Y qué mejor manera de hacerlo que revistiendo una pared completa del salón con una foto de la ciudad tomada exclusivamente para este fin. En blanco y negro, la foto preside este espacio y define dos colores que estarán presentes en la mayoría de las estancias. 

Y combinando con el blanco y el negro, el resto de muebles se mueven en estos colores, como el sofá esquinero de piel, las sillas del comedor o la mesa de forja diseñada por el propio estudio.

Espacios diáfanos

Unos de los cambios fundamentales que sufrió el ático fue el de unir estancias para conseguir espacios amplios y diáfanos. Como fue el caso del pasillo, en el que se eliminaron varias puertas o el del salón, que aunque mantuvo la separación con la cocina, ahora la antigua puerta corredera se ha transformado en un vidrio tintado de negro que permite el paso constante de la luz.

Y aunque cocina y salón estén separados, los une no solo la transparencia del vidrio, sino también el uso del negro, ya que aunque los antiguos muebles de la cocina han sido mantenidos, se han lacado las puertas de este color y añadido una encimera de Silestone blanco. Todo para mantener una estética conjunta.

Una terraza de 42 m2

El ático no solo sorprende por sus nuevos interiores minimalistas y llenos de luz, sino también por la terraza de 42 m2 con la que se conecta el salón. Una terraza a la cual se accede por unas grandes cristaleras que son las encargadas de meter abundante luz natural en la vivienda. 

¿Queréis conocerla un poco más en profundidad?

Colores suaves para el exterior

Contrastando con el blanco y el negro de los interiores, la terraza hace uso de colores más vivos, pero a la vez en tonos claros, creando una atmósfera suave y muy relajada. Los muebles son de materiales naturales y en tonos marrones y grises, mientras que los textiles usan el verde y el azul. Todo aquí parece estar pensado para poder disfrutar del aire libre de una forma tranquila y sin prisas.

Mueble en suspensión

Vamos a ir dejando a nuestras espaldas el salón y la cocina para irnos adentrando en las zonas privadas. Pero para hacerlo, primero tenemos que recorrer el pasillo en el cual el mueble blanco en suspensión que vemos en la imagen nos marca la separación entre la zona de día y la zona de noche. Un mueble diseñado por Dröm para este espacio.

El dormitorio

Hemos llegado al dormitorio. Aquí el blanco y el negro han vuelto a colarse, aunque de una forma mucho más suave que en el salón. Sin embargo, lo que más nos llama la atención es el cuarto de baño integrado en el dormitorio con la ducha como elemento central revestida de vidrio negro.

Vidrio y madera

Terminamos con esta sorprendente imagen. Se trata del interior del cuarto de baño que, gracias al uso del vidrio tintado de negro como pared, los reflejos se multiplican y confunden a nuestro ojo jugando con la profundidad del espacio. Para contrastar, los muebles blancos y el pavimento de anchas lamas de madera clara ofrecen la calidez necesaria en este lugar.

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