De azotea en desuso a oasis exterior

homify سطح مستوي / رووف مستوي
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¿Quién ha visto la azotea de su edificio? Algunos la usan para tender la ropa, otros de solárium cuando comienza a hacer calor. Sin embargo, la gran mayoría de nosotros no tienen ningún interés en ella, ya que frecuentemente se trata de un lugar de escaso diseño donde solo encontramos una gran terraza, en el mejor de los casos. Si alguno decide a subir ahora y asomarse, se dará cuenta de que también la suya está desaprovechada. Y es que en España no tenemos la costumbre de darles uso. 

Ocurría lo mismo en este edificio hasta que Myhomedesign tomó cartas en el asunto. Tras su intervención, la cubierta se convierto en una estupenda terraza mediterránea que ofrece a los habitantes un lugar cómodo y fresco al exterior con buenas vistas. Os contamos los detalles de la transformación a través de la siguiente selección de fotografías.

Una azotea que no se utilizaba para nada

Antes de la reforma, la cubierta era una azotea cualquiera. La geometría del espacio estaba conformada por pilares y muros que no encerraban una geometría regular. Sin embargo, tenía potencial para poder convertirse en lugar diferente. A pesar de intentarlo, su materialidad y colores resultaban poco acogedores. Era un espacio totalmente desaprovechado e inhabitable.

Una terraza maravillosa

Para poder convertirse en un espacio funcional más de su edificio, esta terraza necesitaba ser cómodamente habitable. Para solucionar este primer problema, se decidió introducir diferentes piezas de mobiliario en la terraza. Se optó por incluir una mesa de madera y diferentes asientos a su alrededor. Sillas, butacas, bancos acompañadas de mullidos cojines. El ambiente se decoró con diferentes objetos: macetas, faroles… Pero no se olvidaron de un detalle importante: ¡la vegetación! Diferentes especies envuelven el ambiente en una frescura de lo más mediterránea.

Espacios para todos los gustos

La materialidad es un aspecto muy importante, no solo a nivel constructivo. Las texturas, los colores y acabados contribuyen en el paisaje y en consecuencia en las sensaciones de los usuarios. Para darle un toque exótico y una dosis de calidez, se cubrió el suelo con un pavimento de madera. Los muros se volvieron más blancos y el ambiente cambió completamente su carácter. Para proteger de los rayos del sol y generar sombra se introdujo un toldo muy original con formas de vela de barco.

Un pavimento perfecto

El antiguo balcón en desnivel se unificó con el pavimento de madera y ahí se creó un ambiente diferente. Ese lugar separado del exterior con una barandilla de vidrio acogió el solárium, amueblado con dos tumbonas.

Una terraza con vistas

Terminamos con esta fotografía donde comprobamos de nuevo como la azotea que veíamos en la primera imagen se convirtió en este oasis de relajación. Un lugar tranquilo y sosegado desde donde se pueden disfrutar de las mejores vistas posible: ¡el Mediterráneo!

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