Hablemos de una variedad de pisos que resultan una opción más económica para los fanáticos de la madera, que no pueden darse el lujo de instalar pisos de parquet o de madera maciza: los pisos laminados.
Los instaladores de pisos de homify nos explican las ventajas que presenta este tipo de material, que tiene una aspecto prácticamente idéntico a la madera.
El uso del High Pressure Laminate (HPL) fue fabricado por una empresa sueca en 1977 y desde entonces se ha convertido en una opción muy popular en Europa, Norteamérica y posteriormente en América Latina, donde cada vez nos encontramos con pisos laminados con mayor frecuencia.
Acompáñennos en este recorrido donde les daremos algunos datos interesantísimos de este estupendo material.
Son pisos compuestos de varias capas de material, usualmente derivados de madera con las que se conforman piezas o lamas, que luego se instalarán encajándose entre sí. La última capa es la que le da el acabado en madera, que no es otra cosa que un dibujo que imita el color y la meta de la variedad de madera deseada. Esta última capa está compuesta de resinas de melamina a alta presión, de ahí su nombre.
El grosor de la lama oscila entre 6 y 12 mm. La longitud, por otro lado, varía en función de los modelos, pero el estándar está en el rango entre 1280 y 1350 mm, con anchos de 150 y 180 mm.
Estos pisos son sumamente resistentes a las manchas, salpicaduras, abrasiones y al impacto. Es por ello que son una buena opción para espacios como habitaciones infantiles, ya que se trata de superficies muy lavables.
Si bien los acabados más comunes son las imitaciones de madera en sus colores y vetas reales, también existen colores diferentes, grisáceos o casi blancos. Algunos pisos laminados hasta tienen un acabado en relieve.
Por lo general es necesario o bien cambiar los zócalos o eliminarlos directamente. Cuando una pieza o lama se rompe es necesario cambiarla completa ya que no puede lijarse o arreglarse y esto significaría tener que levantar parte del piso e inclusive el zócalo. Por ello es mejor no tenerlos.
Para disimular u ocultar las uniones de las láminas, es recomendable instalar las lamas de forma perpendicular a las ventanas.
Lo primero, obviamente es deshacernos del revestimiento anterior por completo, limpiando todo rastro de pegamento.
Luego hay que asegurarse de emparejar por completo la superficie antes de la instalación de las lamas, o no quedará parejo el piso laminado.
Las lamas o tablones se encajan entre sí con ayuda de unas lengüetas y después con fuerza hacia abajo.
Finalmente, se limpia bien la superficie para eliminar cualquier vestigio de polvo o de residuos productos de la instalación.
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